¿Qué es la prueba PCR y en qué consiste?
Las pruebas PCR, por sus siglas en inglés de “Reacción en Cadena de la Polimersa” es una prueba de diagnóstico directo que permite detectar un fragmento del material genético de cualquier patógeno o microorganismo.
Así, la PCR o “RT-PCR” por sus siglas en inglés, consiste en detectar la molécula de ARN del coronavirus, lo que lleva a descubrir el material genético del virus SARS-CoV-2 a partir de las muestras clínicas obtenidas de nuestro cuerpo.
Habitualmente se emplea por medio de una muestra respiratoria, ya que, se introduce un hisopo por la nariz o puede obtenerse por muestras en el fondo de la garganta a partir de la saliva. Si, tras el análisis en un laboratorio la prueba detecta ARN del virus, el resultado es positivo, y se confirma que esa persona está infectada por el SARS-CoV-2.
Si la prueba de PCR no detecta el material genético del virus, la persona no estaría infectada; de manera que cuando hay una sospecha clínica importante se debe realizar otra prueba a los días para rectificar que el paciente no está infectado por el virus.
Las PCR tienen tres características básicas:
- Alta especificidad: puede diferenciar entre dos microorganismos muy cercanos evolutivamente.
- Alta sensibilidad: puede detectar cantidades de 20 copias/ml -o incluso menos- de material genético viral.
- Precoz: se detecta el virus en las primeras fases respiratorias.
¿Cuánto tiempo dura la enfermedad si soy covid PCR positivo?
Es recomendable que las personas que han tenido Covid-19 vuelvan a hacerse la prueba PCR con hisopo 4 después de varias semanas de que los síntomas hayan aparecido por primera vez para minimizar el riesgo de infección, esto debido a que el SARS-CoV-2, el virus responsable de la infección por Covid-19, se demora un promedio de 30 días en eliminarse del cuerpo después del primer resultado positivo de la prueba y un promedio de 36 días después de que aparecen los primeros síntomas, pero toma un poco más de tiempo dependiendo de la edad y la gravedad de la infección, esto según los estudios que se han realizado.
De manera que los estudios advierten que, para evitar propagar casos secundarios, la etapa de aislamiento debe ser más larga, alrededor de 30 días desde el inicio de los síntomas, o al menos debe realizar una prueba de seguimiento antes de dejar el aislamiento.
Se puede concluir que, de acuerdo con la evidencia existente, en los casos asintomáticos, la transmisión de la infección ocurriría fundamentalmente en los primeros días de la presentación de síntomas desde 1-2 días antes hasta 2-4 días después. Lo que quiere decir que tienen una probabilidad de infección muy baja.
Los casos leves, la transmisión de la infección ocurriría fundamentalmente en la primera semana de la presentación de síntomas desde 1-2 días antes hasta 5-6 días después. Esto indica que tienen una probabilidad de infección baja.
Los casos graves, la transmisión de la infección ocurriría fundamentalmente en las dos primeras semanas de la presentación de síntomas desde 1-2 días antes hasta 17-24 días después, es decir que tienen una excreción viral de 20 días hasta un máximo de 37 días en los casos críticos curados, y es detectable hasta el final en aquellos que fallecen, indicando una probabilidad de infección más alta, intensa y duradera.
